lunes, 5 de mayo de 2014

BENDITA ADOLESCENCIA 4

Atribuyo nuestra separación a la falta de compromiso, que en esos momentos nos acomodaba y a una relación que nunca dio frutos, distinto fue el resultado al intimidar con una amiga, que por cierto a mi no me gustaba nada de nada ya que según yo tenia mala reputación, en realidad era lo que se decía de ella.
Ante esa irresponsabilidad lo sentí todo perdido, mi irritación e impotencia lo dijo todo y fue cuando nos alejamos. No teníamos compromiso, y no correspondían las explicaciones, pero indudablemente eso hizo que nos distanciáramos. Tu vida tomaba otro rumbo, ibas a tener una responsabilidad en la que yo era parte. Con tristeza sentí el alejamiento.

Ellos crecían felices,
con sueños, risas y amor,
tomaron rumbos precoces,
la vida los separó.

Desde ahí en adelante nuestras vidas tomaron caminos distintos, fuiste a mi matrimonio, muy serio, así no eras tu, no era lo que te caracterizaba, también fui al tuyo y no necesito recordártelo.

Años después solo recuerdo habernos visto una vez mas, en un centro medico, estabas con tu señora y tu segunda hija, yo con mi marido, nos saludamos, compartimos solo un momento y nada mas, luego nos separamos hasta muchos maños mas tarde, sin pasar por alto que por nuestras vidas se escribieron mil historias, momentos buenos, amargos y malos, definitivamente todo habia cambiado o al menos eso creí.
Cuando existe un algo especial dentro de dos personas que por años no se han llamado, no se han visto, han caminado, tropezado y levantado una y mil veces por separado, ese algo se hace notar en un momento, preciso, especifico, casi elegido con pinzas, porque fue ahí y no en otro, que nuevamente nuestros caminos se cruzaron.

Su corazón pareció escapar
cuando recuerda su primer re-encuentro,
y tan solo puede pensar,
que no fue mas que un momento.

Cuando creí tener mi vida tranquila pero a la vez plana y con un hondo dolor que no quería ver, fue en ese momento que me di cuenta que estaba en el lugar equivocado, y que si alguna vez pensé que mi vida daría un vuelco, no creí que sería ese el momento.

Cuando leyó lo escrito,
y las entrañas parecieron enloquecer,
no lo pensó ni un poquito,
en lo que iba a suceder.

No hay comentarios:

Publicar un comentario